Conocí a Jean- François Desrousseaux de Vandières en Bellas Artes de Paris y en 1978 llegué a la Casa de Velázquez en Madrid y encontré a Miguel Negro Macho, ahora nos reunimos los tres para plasmar la visión de la ciudad que tenemos cada uno de nosotros.

   Aunque hemos vivido en los mismos lugares y ambientes nuestro planteamiento básico es distinto, tanto en el concepto de la ciudad como en la forma de plasmarla

   Jean- François Desrousseaux de Vandières es probablemente, de los tres artistas el que mantiene una relación más íntima con el paisaje urbano. Pinta, a menudo, y sin cansarse el mismo paisaje tal como lo hicieron sus maestros “fauves” Matisse , Marquet cuando pintaba delante de su ventana , bien fuera desde Paris o bien desde Oran. También se puede apreciar la influencia de las Catedrales de Monet como variaciones temporales sobre un tema intemporal. Sus técnicas preferidas son el óleo y la acuarela

   Miguel Negro Macho, por su parte, como “reporter” colecciona centenares y hasta millares de fotos en sus frecuentes viajes por capitales europeas, asiáticas o del oriente medio, documentos que le sirven de base para mezclarlos y triturarlos en su ordenador para finalmente conseguir infinitas variaciones montadas sobre soportes que materializan sus exposiciones.

   Para mí, sin embargo el paisaje en general y el urbano en particular es la tela de fondo de un teatro, donde circulan como actores seres extraños a estos espacios así como liliputienses en la ciudad. Aunque mi técnica habitual es la técnica mixta sobre lienzo, comencé a trabajar la técnica virtual a partir de la exposición “E-Gaucín” realizada con Miguel Negro Macho, que todavía hoy se puede ver en www.artagora.es

Francis Daubresse